Si hablamos de una ejecución hipotecaria, hacemos referencia al proceso que se lleva a cabo para exigir el pago de cualquier prestamos garantizado a través de una hipoteca. Los procesos de ejecución hipotecaria están caracterizados por la limitación de las causas de suspensión y oposición, tanto por su velocidad como por facilitar el cobro a los acreedores.
Proceso de ejecución hipotecaria
Este proceso es un mecanismo de protección para un crédito garantizado, por lo que el ordenamiento será favorable al acreedor. Aunque es cierto que, algunos Magistrados y Juces se han hecho eco de esta situación tan dramática que ha supuesto la práctica bancaria para muchas familias.
Por lo tanto, aunque el ordenamiento jurídico dicta claramente a quién beneficiará este procedimiento de cobro, es cierto que la tendencia jurisprudencial ha suavizado el favorecimiento del banco a la protección del consumidor.
Cualquier persona que se vea inmersa en un proceso de ejecución hipotecaria, sabe que será un momento difícil en el que hay que mantener la calma ante esa situación. Está en juego perder un hogar, que te echen de tu casa. Y, lo peor, es que a pesar de perder tu vivienda, nadie puede garantizar que quedarás libre de ese préstamo hipotecario causante de esta situación. Además, estos procesos van acompañados de gran dificultad para ganar, por lo que generalmente se utilizan técnicas para ralentizar y poder ganar un poco de tiempo.
Es posible que si te ves envuelto en algo así, no tengas claro cómo actuar ni qué hacer. La mejor manera de actuar frente a una ejecución hipotecaria, es ponerte en contacto con un abogado especializado en derecho hipotecario. Busca el mejor despacho de abogados de tu ciudad, explícales tu caso y ellos te ayudarán a salir de esta situación de la mejor manera posible.
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